La rabieta es la expresión inmadura del enfado. Forman un comportamiento habitual en niños desde el año y medio hasta los tres años. Estas simples pautas pueden ayudarle a controlar la situación:

. Permanezca calmado.
. Ponga a su hijo en un sitio tranquilo
. Sostenga o abrace a su hijo si intuye que puede correr algún peligro físico
. Ignore a su hijo hasta que se le pase la rabieta
. NO intente razonar con el niño mientras dure la rabieta
. Sea coherente y actúe de igual modo en todos los contextos.
. Cuando ésta termine dirijase como si nada hubiera pasado y dígale lo que le gusta relacionarse con él cuando está tranquilo y no llora.

Silvia Sanchis