by Julie Cox, Teacher in Primary

Sri Lanka is a country that is very dear to my heart. Back in 2016 I took an unpaid sabbatical from my job in the UK to give voluntary service for children with special needs and disabilities in Sri Lanka. I was a founding director of an NGO to support children with special needs and disabilities and we collaborated with other foundations in Sri Lanka and with the health department. I am passionate about supporting children with vulnerabilities, especially children who are unable to attend their local schools and in most cases don’t receive any therapies, and their families who face many difficulties.

Now living in Spain, I am endeavouring to visit Sri Lanka twice a year to volunteer on projects for children with SEND. I have recently returned from a 3 week trip to Sri Lanka where I visited the new Early Intervention Unit in the medical faculty of Colombo University. Last year, our Year 5 children and their families chose to raise money for the MJF Charitable Foundation through a sponsored walk. Their generous donation funded the initial equipment for this new unit, which will provide vital assessments for children, training for adults and therapeutic activities for families. This academic year, our Year 5 team has again chosen the MJF Foundation in Sri Lanka to support.

The MJF has four centres in Sri Lanka and my focus is supporting their schools which provide free education and therapies for children with additional needs and disabilities. They provide free paediatric wheelchairs and have facilitated several wheelchair camps across Sri Lanka. Last month I visited the MJF East Centre near Batticaloa. I shared some holistic learning activities with the children and teaching team. It was my first visit to this centre since 2020 and it filled me with so much love and joy. On my next visit I will facilitate further programmes, including a workshop for teachers and for parents.

I love being part of holistic projects and connecting with like-minded people who see a child’s strengths, their potential and how we can realistically support the family and/or caregivers. Over the years, I have worked with health and social care professionals, physiotherapists, speech and language therapists, education teams and yoga therapists, who have all given their time voluntarily.

The activities which are the most moving and make my heart dance are visiting children with SEND in the community with the public health midwives in the Eastern Province. Away from big towns, the situation for the majority of families is extremely tough economically and psychologically. Family by family, we give our time with a non-judgement and loving connection. We share ideas and tool kits of practices which may help these children.

This phrase resonates deeply with me and helps me each day in Sri Lanka:

We cannot change the world, but each day for that one person, their world may begin to change.


Voluntariado en Sri Lanka con niños con necesidades especiales

por Julie Cox, Profesora de Primaria

Sri Lanka es un país muy querido para mí. En el año 2016 me tomé un año sabático no remunerado de mi trabajo en el Reino Unido para realizar voluntariado en favor de los niños con necesidades especiales y discapacidad en Sri Lanka. Fui directora fundadora de una ONG de apoyo a niños con necesidades especiales y discapacidad y colaboramos con otras fundaciones de Sri Lanka así como con el departamento de sanidad. Me apasiona apoyar a los niños con vulnerabilidades, especialmente a los que no pueden asistir a sus escuelas locales y en la mayoría de los casos no reciben terapias, y a sus familias, que se enfrentan a muchas dificultades.

Ahora que vivo en España, me esfuerzo por visitar Sri Lanka dos veces al año para trabajar como voluntaria en proyectos para niños con necesidades educativas especiales. Recientemente he regresado de un viaje de 3 semanas a Sri Lanka donde visité la nueva Unidad de Intervención Temprana en la facultad de medicina de la Universidad de Colombo. El año pasado, nuestros alumnos de Year 5 y sus familias decidieron recaudar fondos para la MJF Charitable Foundation a través de una carrera benéfica. Su generosa donación financió el equipamiento inicial de esta nueva unidad, que proporcionará evaluaciones vitales para los niños, formación para los adultos y actividades terapéuticas para las familias. Este curso académico, nuestro equipo de Year 5 ha vuelto a elegir la Fundación MJF de Sri Lanka para prestar su apoyo.

La MJF tiene cuatro centros en Sri Lanka y mi labor se centra en apoyar a sus escuelas, que ofrecen educación y terapias gratuitas a niños con necesidades adicionales y discapacidades. Proporcionan sillas de ruedas pediátricas gratuitas y han organizado varios campamentos de sillas de ruedas en Sri Lanka. El mes pasado visité el MJF East Centre, cerca de Batticaloa. Compartí algunas actividades de aprendizaje holístico con los niños y el equipo docente. Era mi primera visita a este centro desde 2020 y me llenó de mucho amor y alegría. En mi próxima visita facilitaré más programas, incluido un taller para profesores y para padres.

Me encanta formar parte de proyectos holísticos y conectar con personas de ideas afines que ven los puntos fuertes de un niño, su potencial y cómo podemos apoyar de forma realista a la familia y/o a los cuidadores. A lo largo de los años, he trabajado con profesionales de la salud y la asistencia social, fisioterapeutas, logopedas, equipos educativos y terapeutas de yoga, todos ellos voluntarios.

Las actividades que más me conmueven y que dejan huella en mi corazón son las visitas a niños con necesidades educativas especiales de la comunidad junto con las matronas de la sanidad pública en la Provincia Oriental. Lejos de las grandes ciudades, la situación de la mayoría de las familias es extremadamente dura desde el punto de vista económico y psicológico. Familia por familia, dedicamos nuestro tiempo sin juzgar y con una conexión afectuosa. Compartimos ideas y herramientas prácticas que pueden ayudar a estos niños.

Esta frase resuena profundamente en mí y me ayuda cada día en Sri Lanka:

No podemos cambiar el mundo, pero cada día para esa persona, su mundo puede empezar a cambiar.